El recorrido de hoy era el mismo que el del lunes,
Zaldiaran, Treviño, Añastro, Ermita de San Formerio, Manzanos, Alto de
Melledes, Rivabellosa, Rivaguda, Subida Cucho, Zaldiaran y acabar de nuevo en
Vitoria entrando por Armentia y Zabalgana para finalizar el día.
Primeramente subir Zaldiaran a aeróbico intensivo para ir
entrando en calor las patas, y aunque amaneció con sol pero en las sombras de la
carretera se seguía viendo placas de hielo, y es que este frio se nos ha pegado
a la capital alavesa que no hay forma de librarse del frio.
Una vez coronado dirección a Añastro por Treviño y de ahí a
la trampa del día, San Formerio, y es que aunque es una subida durísima parece
ser que le estoy cogiendo gusto y le estoy pillando el tranquillo jajaaa, por
decir algo.
Picos de pendiente Máximas en San Formerio.
Como el lunes las placas de hielo se hacían visibles en la
subida, pero no eran muy grandes por lo que no me lo pensé y tiré para arriba
hacer la ascensión. En esta ascensión me apreté las tuercas bastante, no casi
al 100% pero poco le faltó, jejejee. La verdad es que dejé bastante de las
piernas y el corazón en la subida, como ya he dicho poco me quedó en la
reserva, los datos fueron bastante acertados y se vislumbra poco a poco mejoría,
aunque se puede hacer algo mejor. Las medias y máximas de la ascensión fueron
188ppm de media, 343 watios de media en toda la subida, 199 ppm de pulso Máximo
y 529 watios de Máxima, no estuvo nada mal la subida pero se puede mejorar algo
todavía y en ello estamos.
Una vez coronado fotos de rigor, aunque con todos los coches
de cazadores con sus perros fue un poco pobre la foto pero es que no había mas.
A descender tocaba, estaba peligroso pero se veía perfectamente la zona de
hielo y se podía esquivar bien sin problemas por lo que bajé más tranquilo y
confiado que la última vez, error!!, estaba atento del hielo blanco en la
carretera pero no del hielo negro, hielo que no se ve y literalmente a unos 25
km/h patine y me cruce totalmente dándome tiempo a sacar una de las piernas del
pedal y hacer auténticos malabares para no caerme, la verdad es que no se si
por la experiencia en BTT o porque se me apareció la Virgen de San Formerio
pude mantener el equilibro hasta que pasé la zona del hielo negro, parada después
para respetar y tranquilizarme del susto y para abajo de nuevo con más cuidado
si cabe y acojonado para que negarlo.
Una vez en Pangua camino a Manzanos para ir a la siguiente ascensión
del día, el alto de Melledes, al cual también le estoy cogiendo cariño. Esta
subida también la tenía que hacer zurrándome, no al 100% pero tampoco con
muchas reservas, así que una vez pasado Manzano hasta Melledes toco darles
calor a las patas. Así como el lunes la subida estaba limpia de hielo esta vez
sorprendentemente había zonas de hielo, pero como la carretera no está muy bien
asfaltada no notabas mucho el hielo por la gravilla que hay. La verdad es que
en esta subida me encuentro cómodo y eso que es también bastante durilla pero
le voy cogiendo el tranquillo. La verdad es que las sensaciones estaban siendo
buenas aunque sufría y tenía las patas duras como piedras pero aguantaba muy
bien el tirón, pero cuando estaba cambiando al plato para hacer los últimos 600
metros de la zona dura de subida pillé un bache con tan mala suerte de que se
me salió la cadena, bufff parar a ponerla de nuevo en su sitio y seguir con la
subida. Un poco de rabia me dio la verdad porque me rompió el ritmo pero aun así
contento con la subida y sensaciones.
Una vez coronado para abajo en dirección Rivabellosa para
continuar por Rivaguda pasando antes por el polígono de Arasur y subir la Cota
de Lacervilla. Cota donde también me achuche, no tanto como las otras ascensiones.
Debía subirlo a umbral anaeróbico sin pasar de 180ppm y la verdad es que al
final la media fue de 177ppm y con sensaciones en las patas de que podía algo más,
pero todavía quedaban Cucho y Zaldiaran y había que reservar algo en las patas.
Bajada y poco a poco hacia la siguiente ascensión del día,
Cucho. esta subida como el día anterior debía de hacerla con el plato y
atracado para coger fuerza y he de decir que se hace dura de narices la verdad
y el tramo del 13% se hace eterno con el 52 y menudas chepadas metía jejejee.
Esta ascensión la verdad es que ya tenía las patas en
reserva y aunque realice buena subida trabajando al ritmo y atrancado como debía
la hice más por cabezonería que por otra cosa porque llevaba las patas
calentitas, calentitas.
Coronar y dirección a Doroño para subir Zaldiaran, y como el
lunes de la misma forma, atrancado y con poca cadencia. Como en Cucho fue mas por
cabezonería que por otra cosa porque iba ya contando las líneas de la carretera
para ver lo que quedaba. Y es que esta semana ha sido dura y llegando el fin de
semana y metiéndose uno estos entrenamientos se llega bastante justito, pero es
lo que hay.
Coronar Zaldiaran y para abajo hacia Vitoria, bajada hasta
Armentia donde alargaría un poco por la zona de Zabalgana para soltar patas y
llegar a casa con el trabajo bien hecho.
Las sensaciones la verdad es que fueron buenas, a pesar de
tener las patas duras respondieron a la perfección aunque queda trabajo por
hacer y algún kilo que limar que estas navidades a todos nos está pasando factura
jejee. Ya queda menos para la Costa Blanca Bike Race que ya tengo ganas de ir a
disfrutar y conocer esa prueba.
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